El otro día vi otra vez esa película odiada por muchos cuyo título es Click. En fin, a mí la primera vez no me acabó de desagradar del todo. Me reí de vez en cuando y ya está. Pero ahora que la he visto por segunda vez, he descubierto tres cosas nuevas: que el comienzo es una mierda, el final muy predecible, y desde la mitad para atrás muy paranoica.
Ya sé que me van a venir los cinéfilos serios a decirme que es una adamsandlerada de mierda, y que la única moraleja que tiene es que los pedos huelen a mierda. Pero reduciendo todo a su mínima expresión tenemos una historia que viene a decir que la vida pasa a toda hostia y que hay que vivirla de puta madre. Y que hay que cuidar a la familia y no obcecarse con el trabajo. Vamos, un poco lo de siempre, ya nos lo enseñó Jim Carrey en Mentiroso compulsivo y Orson Welles en Ciudadano Kane, dos películas casi idénticas.
Pero Click tiene una escenita final que te hace replantearte un poco todo y pensar en que no harían falta segundas oportunidades si no se tirarán a la mierda las primeras. En fin, no sé a dónde quiero llegar con todo esto. El caso es que Click me gusta y ya está.
1 comentario:
Te apoyo Adri, será todo lo mala que quera decir la gente, pero me gusta
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